Mercados mexicanos famosos por sus comidas

En el panorama gastronómico mexicano, más que en los restaurantes, es en los mercados donde se puede probar la auténtica sazón tradicional: conozcamos algunos

La culinaria y la gastronomía mexicanas, bien lo sabemos, no tiene comparación. Y si bien las mejores comidas uno las prueba en las cocinas de las familias, donde la tradición de siglos se hace presente y nos llena de sabores extraordinarios, fragantes aromas y hermosos colores y texturas. Pero otro sitio donde uno puede probar los mejores platillos tradicionales mexicanos, más que en los restaurantes, es en los mercados de los distintos pueblos, ciudades y estados de la República Mexicana. En este artículo conoceremos algunos de los más famosos.

Recuerda que, la mayor parte de las veces, en los mercados encontrarás comida que cumple con lo que los mexicanos llamamos “las tres B”, que son: buenos, bonitos y baratos.

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Mercado Melchor Ocampo

En la ciudad de Puebla, vaya que se come como Dios manda. Desde el tradicional mole poblano, que se sirve con su arrocito rojo a un lado, con una pieza de pollo o en enchiladas, es una de las joyas de la corona de la gastronomía nacional. También están las cemitas, los tacos árabes, las picadas y otras delicias típicas locales. Y uno de los mejores mercados para probar todas estas maravillas es el Mercado Melchor Ocampo, ubicado en el barrio del Carmen del centro histórico de Puebla, donde además de poder comprar flores, puedes probar el mole, los dulces típicos, los famosos chiles en nogada —cuando es temporada— y la especialidad de la casa: las cemitas rellenas, que pueden prepararse con pollo, milanesa, salchicha, pata o jamón.

El mercado se encuentra a cinco minutos del Zócalo de Puebla, en la avenida 21 Ote. No. 215.

Mercado San Juan de Dios

Como lo podrás suponer, este famoso mercado se encuentra en la ciudad de Guadalajara y es todo un festín para los sentidos. El edificio consta de tres niveles, y en ellos podrás adquirir sombreros típicos, bolsas de todos tipos, jorongos, huaraches y piezas de cerámica como los famosos jarritos. Pero lo principal es la comida, que podrás hallar en el segundo piso: entre otras maravillas de la cocina tapatía, las protagonistas son la tradicional birria, que puedes probar en plato, en tacos, tradicional o tatemada, así como las famosas tortas ahogadas —que consisten en una pieza de pan llamada birote, rellena de carnitas de cerdo y bañada en una salsa roja que puede ser picante o muy picante—, las cuales se expenden en muchos de los locales que ahí existen.

El mercado San Juan de Dios está en la esquina de la Calz. Independencia y la Av. Javier Mina, a un costado de la Plaza Tapatía y del Instituto Cultural Cabañas.

Mercado de comidas de Coyoacán

No, no nos referimos al más famoso de los mercados, ubicado en las calles de Ignacio Allende, Malitzin y Xicoténcatl, sino al mercado de las comidas, el cual se encuentra en la esquina de la calle de la Higuera —que desemboca en la Plaza de la Conchita— y Caballocalco, a espaldas de la Iglesia de San Juan Bautista y del Jardín Hidalgo, en el centro de Coyoacán. Ahí hay dos especialidades: las muy célebres quesadillas, que dan nombre al mercado y pueden ser de ingredientes como queso, papa, flor de calabaza, tinga de res o de pollo, picadillos o chicharrón prensado, y van fritas —sumergidas en aceite— o asadas al comal; la otra especialidad, que sólo se puede encontrar por las noches y los fines de semana, son los famosos hot-cakes que, desde hace décadas, una familia prepara con las más vistosas formas que a uno se le ocurran. Además, hay un pozole que hay que probar, amén de buenos tacos y tostadas.

Mercado Municipal de Zihuatanejo

Ahora, te compartiremos un mercado relativamente poco conocido, pero que es realmente espectacular. Si vas a Zihuatanejo, o bien te hospedas en cualquier de la hermosa zona turística de Ixtapa, dile a un taxista que te lleve al Mercado Municipal. Ahí, desde que entras te recibirá un delicioso aroma a mariscos y pescados, los cuales puedes comprar muy frescos —es decir, recién pescados en la bahía que está a unos metros—, o bien, preparados en caldos, cocteles, filetes, quesadillas y preparados de otros modos tradicionales. El servicio es muy bueno, los platos están muy bien servidos y, lo mejor, a un precio muy accesible.