Uno de los más grandes sueños que puede tener un nino o una niña, es el de convertirse en astronauta y viajar en una nave espacial. Y el ilustre paisano de quien hablamos en esta ocasión, el doctor Rodolfo Neri Vela, tiene el honor de haber sido el primer astronauta mexicano en haber viajado al espacio exterior, a bordo del transbordador espacial Columbia, propiedad de la NASA.
Conozcamos un poco de su vida, sus estudios, cómo llegó al programa espacial de la NASA, en qué consistió su misión y a qué se dedica actualmente. Prometemos que será algo “de otro mundo”.
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Según se lee en su website oficial, Rodolfo Neri Vela nació en Chilpancingo de los Bravo, Guerrero, México, el 19 de febrero de 1952. Se graduó como Ingeniero en Comunicaciones y Electrónica en la Facultad de Ingeniería de la UNAM en 1975, estudió una maestría en la Universidad de Essex, Inglaterra, y es doctor en ingeniería por parte de la Universidad de Birmingham, también en Inglaterra, en el área de Electromagnetismo Aplicado. Todos estos estudios los realizó becado por el Consejo Británico y el CONACyT.
En 1985, Rodolfo Neri fue seleccionado para convertirse en el primer astronauta de México y primer representante de un país latinoamericano en una misión tripulada al espacio exterior de la NASA. Como parte de la tripulación de la misión STS-61-B, despegó de Cabo Cañaveral, Florida, el 26 de noviembre de 1985 y orbitó la Tierra 109 veces a bordo del transbordador espacial Atlantis; durante la misión se colocaron tres satélites de comunicaciones en órbita, entre ellos el mexicano Morelos-2. Neri Vela realizó diversos experimentos y un extenso trabajo de fotografía de la superficie terrestre, con particular interés en retratar el territorio mexicano desde el espacio.
Todos los experimentos de esta misión se llevaron a cabo con éxito y todo el equipo funcionó dentro de los parámetros establecidos —aunque después el comandante Brewster Shaw confesó haber puesto un candado en las compuertas por desconfianza a que el mexicano “se pusiera loco” en el espacio. Con todo, el transbordador Atlantis aterrizó sano y salvo en la Base de la Fuerza Aérea Edwards el 3 de diciembre de 1985.
Además de su experiencia como astronauta de la NASA, el doctor Neri Vela colaboró posteriormente, en 1989 y 1990, con la Agencia Espacial Europea (ESA) en Holanda, en el proyecto de la Estación Espacial Internacional, misma que actualmente ya está en órbita alrededor de la Tierra.
Rodolfo ha ejercido su profesión de ingeniero y la enseñanza universitaria en varias instituciones: la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el Instituto de Investigaciones Eléctricas y la UNAM, donde por más de tres décadas ha sido académico de licenciatura y posgrado e investigador en Matemáticas, Circuitos Eléctricos, Antenas, Teoría Electromagnética, Comunicaciones por Satélite, Transmisión por guías de microondas y fibras ópticas.
Ha escrito libros de texto para ingenieros en telecomunicaciones que han sido usados por muchos años en la UNAM, el IPN y muchas universidades y tecnológicos de México y América Latina. También ha escrito cerca de 15 libros de divulgación científica en las áreas de astronáutica y astronomía, por ejemplo: México en el Espacio (El Planeta Azul), Estaciones espaciales habitadas, La exploración del Universo y El pequeño astronauta y el planeta rojo, entre otros.
También ha conducido/participado en programas de televisión educativa y es miembro de la Academia de Ingeniería, el Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas, y la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística. Durante años fue uno de los principales promotores para la creación de la Agencia Espacial Mexicana, que finalmente se convirtió en ley en julio de 2010. En 2015 recibió la Medalla al Mérito Ciudadano y en ese año recibió de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, del gobierno mexicano, la Medalla “Eduardo Neri y legisladores del 2013”.
Y a que no te sabías esta: en la película Buscando a Dory (2016) de Pixar-Disney, el doctor Neri Vela realizó el doblaje de la voz institucional del Instituto de Investigación Marina donde la pececita olvidadiza es rescatada. Sin duda, Rodolfo es y seguirá siendo toda una inspiración para las jóvenes generaciones.
