¿Qué significan las estrellas de los hoteles en México?

Una, dos o hasta cinco estrellas, ¿qué significa este sistema de clasificación y quién decide cuántas estrellas tiene cada hotel?

Cuando estamos planeando un viaje y a la hora de hacer los presupuestos, mucho importa si el hotel que elegimos es de una estrella, de dos, tres, cuatro o hasta de cinco estrellas, pues normalmente a mejor es el servicio que ofrece más alta es su tarifa. Pero, ¿qué significa exactamente este sistema de clasificación por estrellas? Y más aún, ¿quién o qué autoridad decide de cuántas estrellas es un hotel en México?

A diferencia de lo que sucede en otros países, en nuestro país la actividad turística y el servicio que ofrece la industria hotelera está regulado por la Secretaría de Turismo (Sectur), la cual establece el criterio de clasificación.

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Según se lee en un sitio oficial del gobierno mexicano, en México existe el Sistema de Clasificación Hotelera (SCH), una herramienta metodológica que comenzó a funcionar en 2015 y que funciona a través de un mecanismo de autoevaluación regulado por Sectur, para permitir que sean los propios hoteles den a conocer la situación de sus instalaciones y servicios ofrecidos, así como identificar áreas de oportunidad.

El reglamento del SCH, que está contemplado en la Ley General de Turismo, cuando se trata de un hotel o establecimiento de hospedaje, considera ocho ejes de desempeño:

  1. Acceso, exterior y generales
  2. Comunicación
  3. Habitación y baño
  4. Alimentos y bebidas
  5. Recepción
  6. Control de temperatura
  7. Servicios
  8. Áreas públicas

Dentro del Sistema de Clasificación Hotelera, se considera un número de variables que atienden los ocho ejes de desempeño y cada variable confiere una puntuación; así, el total obtenido en esta puntuación corresponde a una categoría con estrellas: de 1 a 260 puntos, una estrella; 261 a 520, dos estrellas; 521 a 780, son tres estrellas; de 781 a 1040, cuatro estrellas, y de 1041 a 1300, corresponde a cinco estrellas. También puede darse el caso de que el prestador del servicio turístico decida registrarse como “Sin categoría”.

Además de lo anterior, la Secretaría de Turismo reconoce un total de 16 “vocaciones”, dependiendo de la orientación en el servicio que ofrece un hotel. Estas vocaciones son: Boutique, Cama y desayuno (bed & breakfast), Carretera, Centro de ciudad, Ciudad, Eventos y convenciones, Express, Hacienda, Lujo, Negocios, Playa/vacaciones, Reserva, Servicios completos, Servicios limitados, Servicios selectos y Todo incluido.