Qué hacer en Cholula, la ciudad más antigua de México

A unos kilómetros de Puebla se encuentra Cholula, una ciudad fundada incluso antes que México-Tenochtitlan y que es un deleite para el turista

En el estado de Puebla, a tan sólo 8 kilómetros de distancia de la capital del estado —en el municipio de San Andrés Cholula—, se encuentra Cholula de Rivadavia, una ciudad de gran importancia histórica desde tiempos prehispánicos que desde el año 2012 fue nombrado Pueblo Mágico. Conozcamos un poco de su historia, de sus atractivos turísticos —como la Gran Pirámide de Cholula—, las actividades que se pueden realizar y cómo se puede llegar a ella.

Además, hay que tomar en cuenta que se trata de la ciudad mexicana más antigua que aún sigue habitada, pues los primeros vestigios de ocupación humana datan del siglo XII antes de nuestra era.

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Historia

La actual ciudad de Cholula —cuyo nombre oficial es Cholula de Rivadavia, en honor a un ciudadano argentino de nombre Bernardino de Rivadavia y como una forma de compensar que en Buenos Aires una avenida lleva el nombre de Benito Juárez— se encuentra en el municipio de San Andrés Cholula y muy cerca de lo que fuera el asentamiento original o la ciudad sagrada de Chollolan, que en náhuatl significa ‘lugar de huída’, aunque algunos también lo han llegado a interpretar como ‘Agua que cae en el lugar de huida’, lo cual se refiere a los grupos toltecas que llegaron a la región luego de su expulsión de Tula, cerca del año 1000 d.C.

En su tiempo de esplendor, la ciudad de Chollolan competía en esplendor y poderío con Teotihuacan. A la llegada de los españoles en 1519, el propio Hernán Cortés se asombró con su magnificencia y declaró que en Cholula había “dos mil casas hermosas” y “tantos templos como días en el año”, dicho que se conserva hasta la fecha, pues se dice que en la ciudad hay “una iglesia para cada día del año”. A pesar de ello, el conquistador sometió por la fuerza a sus habitantes, asediándolos con un sitio y masacrándolos en la famosa Matanza de Cholula, en la que se dice que los muertos fueron tantos que la sangre corría por las calles como agua de lluvia.

Tras la Conquista, el 27 de octubre de 1537 el emperador Carlos V —Carlos I de España— concedió a Cholula el título de ciudad. Así, durante la Colonia se construyeron más de un centenar de iglesias, sin llegar a las 365 que pregona el dicho popular. Actualmente la ciudad cuenta con unos 90 mil habitantes y se encuentra circunscrita a la Zona Metropolitana Puebla-Tlaxcala, siendo prácticamente una ciudad conurbada a la capital del estado, la heroica Puebla de Zaragoza. Una publicación del Gobierno de México dice que “Cholula es conocida por combinar la historia viva de un pueblo prehispánico con la riqueza arquitectónica y cultural de las construcciones coloniales”.

Turismo

Hay dos atractivos principales que no pueden dejar de conocerse si uno visita la ciudad de Cholula: la Gran Pirámide, en cuya cima se encuentra el Santuario de la Virgen de los Remedios, y el Ex-convento Franciscano de San Gabriel, uno de los conventos más antiguos de América. Además, no hay que perderse el majestuoso Templo de San Francisco Acatepec, que ostenta una increíble fachada elaborada con piezas de Talavera, así como los numerosos restaurantes, bares y comercios que soportan el nombramiento de Cholula como Pueblo Mágico. Pero vamos por partes…

La Gran Pirámide de Cholula preside la zona arqueológica de la ciudad, y en la antigüedad recibía el nombre de Tlachihualtépetl, que quiere decir “cerro artificial” o “cerro hecho a mano”, pues se trata de una construcción colosal consta de siete pirámides superpuestas que en conjunto tienen una altura total de 65 metros, lo que la convierte en una de las pirámides más altas y más masivas de América y del mundo. Originalmente estaba dedicada a Tláloc, el dios mexica de la lluvia, y actualmente en su cima está una iglesia colonial dedicada a la Virgen de los Remedios, a la cual es posible acceder luego de un empinado ascenso por la pirámide.

Parte del paseo consiste en recorrer los túneles internos de la pirámide, los cuales no son aptos para la gente ansiosa o con claustrofobia, pero permiten ver parte de las escalinatas originales de la construcción que quedaron sepultadas bajo la tierra y la maleza con el paso de los siglos. La zona arqueológica que está a los pies del “cerro” también es interesante y en ella se encuentra el llamado “patio de los altares” que es uno de los principales atractivos. Cabe destacar que esta zona ya estaba abandonada a la llegada de los españoles, pues data de muchos siglos atrás.

Otra construcción imperdible, esta de manufactura colonial, es el Ex Convento de San Gabriel Arcángel, uno de los más antiguos de América. Este edificio fue fundado por la orden Franciscana y muestra una arquitectura de estilo con influencias del gótico y del barroco, con numerosas cúpulas que pueden ser vistas desde la Pirámide; comenzó a construirse en mayo de 1529, sobre un lugar donde se rendía culto al dios Quetzalcóatl, y se terminó en agosto de 1531. Anexo a este templo está la Capilla Real o de Naturales, que fue erigida en 1540 con el propósito de evangelizar a los indígenas de la zona.

Por otro lado, para darse una idea completa de la evolución histórica de Cholula desde los tiempos prehispánicos hasta la actualidad, lo mejor es visitar el Museo Regional de Cholula del INAH, que se encuentra a las faldas de la Pirámide. Este museo muestra la evolución geológica del valle y su desarrollo cultural desde la época prehispánica, al tiempo que expone el valioso acervo arqueológico que es el resultado de las excavaciones emprendidas por el Instituto.

Muy cerca de Cholula, también se encuentra el poblado de Santa María Tonantzintla, cuya iglesia es una muestra del abigarrado y hermoso barroco mexicano, con una multitud de imágenes religiosas, ángeles y arcángeles cuya abundancia y belleza compiten con la famosa Capilla del Rosario de Puebla, sólo que éstos están decorados en colores brillantes, fruto de las manos artesanas indígenas y de los pigmentos naturales de la zona.

También hay que conocer la oferta turística de Cholula, que cuenta con numerosos restaurantes donde se puede probar la afamada gastronomía poblana, además de bares, hoteles y otros sitios que hacen las delicias de los visitantes. Para llegar, si vienes desde CDMX hay que tomar la autopista México-Puebla y pasando el aeropuerto de Huejotzingo, encontrarás la desviación a Cholula. O bien, si vas en transporte público, llega a la Central de Autobuses de Puebla (CAPU) y de ahí toma uno de los muchos camiones que llegan allá; otra opción es tomar el tren que sale desde el centro de Puebla, muy cerca del Museo del Ferrocarril, que luego de un trayecto de 40 minutos te llevará a la histórica ciudad más antigua de México.